Pedro Álvarez Miranda

Pintor y joyero nacido en Oviedo en 1903 y fallecido en su ciudad natal en 1990.
Hijo del joyero Pedro Álvarez del Río, fundador a finales del siglo XIX de la casa comercial y taller que después heredará su hijo. A los dieciséis años decide dedicarse de lleno a la pintura, matriculándose en la Escuela de Bellas Artes y Oficios de Oviedo, donde recibió el magisterio de Víctor Hevia. Viajó con su padre por Europa, principalmente Alemania, especializándose en el dibujo creativo para la alta joyería. Se dedicó al óleo y a la acuarela, siendo esta última técnica, de la que poseía un indiscutible dominio, la que le granjeó en mayor medida su prestigio.
Como pintor tomó parte en exposiciones colectivas a desde 1949 hasta 1964, y además realizó exposiciones individuales en Madrid a mediados de los sesenta. Dentro de su producción descuellan las obras de tipo paisajista, que lo inscriben en la escuela de paisajistas liderada por Ruperto Álvarez Caravia.
De su labor como joyero hay que subrayar que se encargó de la restauración de las joyas de la Cámara Santa de la Catedral de Oviedo tras su sustracción y destrozo, acaecida en el verano de 1977.