Parque Nacional de Picos de Europa

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El Naranjo de Bulnes

El Parque Nacional de Picos de Europa pertenece a la red de Parques Nacionales de España, y fue uno de los primeros espacios naturales protegidos de la península (junto con Ordesa, ambos son espacios protegidos desde 1918).

En un primer momento, recibió el nombre de Parque Nacional Montaña de Covadonga.

Descripción del Parque

La superficie total del parque es de 64.660 hectáreas. El carácter más sobresaliente de este paisaje es, sin duda, su naturaleza geológica. Los elementos morfológicos que podemos apreciar hoy en día en este Parque son el producto de la acción de los glaciares, y de una acción cárstica, sobreimpuesta al modelado glaciar, debido a la solubilidad de estas rocas frente a las aguas meteóricas.

Sus bosques de hayas, robles o abedules, junto con las formaciones de monte bajo, matorrales y pastizales que los sustituyen, así como praderas existentes gracias a la tradicional presencia del hombre y animales, constituyen, sin duda, una importante muestra de la variabilidad ecológica y paisajística de la zona.

El animal más representativo es el rebeco. Existen otros con desigual distribución, como son el jabalí, el zorro y gran diversidad de aves, reptiles y mamíferos de pequeño tamaño.

Entre los lugares más característicos de este Parque Nacional, hay que destacar los Lagos de Enol y Ercina, los cuales se encuentran sobre depósitos glaciares y morrénicos. Otro punto singular es, sin duda, la ermita de Covadonga, construida en señal de reconocimiento por la victoria cristiana, que con el paso del tiempo se ha convertido en un signo político-religioso y en lugar de peregrinación mariana.