Diferencia entre revisiones de «Ponga»
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En el siglo XVIII el Catastro de Ensenada describe el municipio como área poblada y productiva dedicada primordialmente a la ganadería y al laboreo de las tierras. Había entonces 40 molinos y 4 batanes (mazos de madera) pero se carecía de taberna, aunque varios vecinos tenían permiso para trajinar vino desde Castilla. Durante el siglo pasado, el municipio experimentó un fuerte aumento de población que generó una numerosa emigración de jóvenes varones a América (Cuba, Argentina, Méjico, Chile) y que provocó nuevas actividades económicas: reducción del monte para abrir praderías y obtener carbón vegetal, instalación de ferrerías, como la de Soto Rodrigo, y apertura de carreteras. Estos cambios no modificaron el funcionamiento de los concejos, cuyas costumbres y reglas, heredadas del medievo, subsisten todavía como formas locales de gobierno; por ejemplo, en Sobrefoz, las Ordenanzas Parroquiales dictaminan sobre todas aquellas cuestiones que interesan a la comunidad: pastos comunales, rentas, multas, u obligaciones de los forasteros. | En el siglo XVIII el Catastro de Ensenada describe el municipio como área poblada y productiva dedicada primordialmente a la ganadería y al laboreo de las tierras. Había entonces 40 molinos y 4 batanes (mazos de madera) pero se carecía de taberna, aunque varios vecinos tenían permiso para trajinar vino desde Castilla. Durante el siglo pasado, el municipio experimentó un fuerte aumento de población que generó una numerosa emigración de jóvenes varones a América (Cuba, Argentina, Méjico, Chile) y que provocó nuevas actividades económicas: reducción del monte para abrir praderías y obtener carbón vegetal, instalación de ferrerías, como la de Soto Rodrigo, y apertura de carreteras. Estos cambios no modificaron el funcionamiento de los concejos, cuyas costumbres y reglas, heredadas del medievo, subsisten todavía como formas locales de gobierno; por ejemplo, en Sobrefoz, las Ordenanzas Parroquiales dictaminan sobre todas aquellas cuestiones que interesan a la comunidad: pastos comunales, rentas, multas, u obligaciones de los forasteros. | ||
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==Datos del Concejo== | ==Datos del Concejo== |
Revisión de 01:04 27 jun 2010
Desde la antigüedad el municipio de Ponga ha sido lugar de asentamiento humano en los valles y en los altos estratégicos de la cordillera. Poblados neolíticos, castros astures o lápidas sepulcrales romanas son algunos de los vestigios de un rico pasado. Los restos romanos encontrados parecen pertenecer a puesto de vigilancia de los pasos a León por los puertos de Ventaniella y Arcenorio.
Durante la ocupación árabe los ponguetos se incorporaron al grupo de resistentes astures, organizados en torno a Pelayo y con centro en Cangas de Onís, y participaron activamente en la batalla de Pontuvio, cuya victoria todavía se celebra anualmente durante la fiesta de la Santina de Arcenorio.
A lo largo de la Edad Media obtuvo el municipio diversos privilegios reales: libertad de pastos para sus ganados en todo el reino y exención del impuesto de comercio o portazgo. En 1188 Alfonso IX realiza una donación a Pedro García Caso que comprendía el territorio de Cazo, que se integró en el municipio muy posteriormente, en 1827.
A pesar de su aislamiento geográfico consiguen los ponguetos cierto relieve durante la Edad Moderna, según lo prueban varios documentos: en 1487 la reina Isabel la Católica reafirma su patronazgo sobre la iglesia de San Juan de Beleño y posteriormente los Reyes Católicos realizan diversos nombramientos municipales: escribano, regidores o veedores.
En el siglo XVIII el Catastro de Ensenada describe el municipio como área poblada y productiva dedicada primordialmente a la ganadería y al laboreo de las tierras. Había entonces 40 molinos y 4 batanes (mazos de madera) pero se carecía de taberna, aunque varios vecinos tenían permiso para trajinar vino desde Castilla. Durante el siglo pasado, el municipio experimentó un fuerte aumento de población que generó una numerosa emigración de jóvenes varones a América (Cuba, Argentina, Méjico, Chile) y que provocó nuevas actividades económicas: reducción del monte para abrir praderías y obtener carbón vegetal, instalación de ferrerías, como la de Soto Rodrigo, y apertura de carreteras. Estos cambios no modificaron el funcionamiento de los concejos, cuyas costumbres y reglas, heredadas del medievo, subsisten todavía como formas locales de gobierno; por ejemplo, en Sobrefoz, las Ordenanzas Parroquiales dictaminan sobre todas aquellas cuestiones que interesan a la comunidad: pastos comunales, rentas, multas, u obligaciones de los forasteros.
Datos del Concejo
- Superficie: 20,32 km².
- Capital: San Juan de Beleño.
- Ámbito Administrativo: Mancomunidad del Oriente de Asturias.
- Ámbito Judicial: Partido Judicial de Cangas de Onís.
- Medio Ambiente: Todo el concejo está incluido en el Parque Natural de Ponga, espacio protegido por el Principado de Asturias.
El concejo de Ponga limita al norte con Piloña, al sur con León, al este con Amieva y al oeste con Caso.