Estación del Vasco
Se inauguró en el año 1906 y tenía su entrada principal por la Calle Jovellanos.
Constaba de dos plantas comunicadas por unas grandes escaleras que descendían hasta las vías del ferrocarril Vasco-Asturiano.
Este ferrocarril se ideó para el traslado del carbón de las minas de la cuenca del Aller y del Caudal hasta el mar, pasando por Trubia donde se encontraba la Fábrica de Armas, aunque también sirvió para el transporte de viajeros y otras mercancías. El primer tramo, que comunicaba Oviedo con el puerto de San Esteban de Pravia a través de Trubia y Grado, se inauguró en agosto de 1904. Posteriormente, las vías se extendieron hasta Figaredo y Ujo. En 1972, este ferrocarril pasó a propiedad de FEVE.
Muy parecida a la estación Metropolitana de París, en la arquitectura de la estación del Vasco destacaba la pasalera que sobrevolaba las vías y dos andenes, su cantina y, especialmente, sus carteles publicitarios en cerámica, muchos de los cuales se perdieron cuando se demolió la estación en el año 1989. Otros se han vuelto a colocar en la actual parcela de la estación de FEVE dentro de la estación de RENFE.
En el solar, el Ayuntamiento proyectó la construcción de un palacio de congresos, entre otros usos. Finalmente la corporación municipal, en el 2006, sacó a la venta la parcela que adquirió la sociedad Jovellanos XXI. En 2007, se proyecto para la parcela un uso comercial y residencial con la construcción de las llamadas Torres de Calatrava, que finalmente se desestimó por la oposición generalizada de la ciudadanía.