Arca Santa
Una de las reliquias que se custodian en la Cámara Santa de la Catedral de Oviedo.
Caja de madera de cedro con chapa de plata y sobredorada.
Las dimensiones de la caja originaria, en las que se guardaban las reliquias de la catedral, son de 1'90 x 0'93 x 0'75. En ocasiones especiales, este Arca, se utilizó como altar. Se piensa que fue trasladada desde Jerusalén a Toledo, y desde allí al Monsacro hasta que Alfonso II la traslada a la capilla de San Miguel en su palacio de Oviedo.
Según la leyenda el obispo Ponce trató de abrir el arca y quedó cegado por la luz que salía de ella.
En el año 1075, Alfonso VI viaja a Oviedo con la intención de dotar a este Arca de una nueva caja de plata, según figura en el Documento de Apertura del Arca Santa. En este año se graba una inscripción que recoge parte de las reliquias que se encuentran en el interior del arca.